Viernes 16 de diciembre de 2022. En una sesión de balance de final de año de alto nivel, la cual contó con la presencia de la Directora General de la OMC, Ngozi Okonjo-Iweala, se destacaron los progresos alcanzados durante 2022 por los participantes de las negociaciones sobre facilitación de inversiones para el desarrollo, coordinadas por la Embajadora de Chile ante la OMC, Sofía Boza, junto al Embajador de la República de Corea, Jung Sung Park. El principal hito de la sesión fue la presentación del proyecto de Acuerdo de Facilitación de Inversiones para el Desarrollo.
En sus palabras iniciales, la DG de la OMC destacó que las necesidades de inversión sostenible están creciendo, destacando aquéllas para una economía con menores emisiones de carbono, pero los recursos, particularmente para los países en desarrollo más pobres, están disminuyendo. En esta situación, la facilitación de la inversión, en línea con las medidas prácticas previstas en el proyecto de Acuerdo, se vuelve particularmente importante y valiosa.
En efecto, el futuro Acuerdo de Facilitación de Inversiones para el Desarrollo que emane de las negociaciones en curso tiene por objetivo mejorar el clima para la inversión extranjera directa (IED) y reducir los costos, a través de mejorar la transparencia, agilización de procedimientos y promover la cooperación internacional, con foco en una mayor participación de los Miembros en desarrollo y los Miembros menos adelantados en los flujos mundiales de inversión.
En palabras de la Embajadora Boza “el futuro Acuerdo de Facilitación de Inversiones para el Desarrollo será el primer Acuerdo de la OMC que aborde directamente y como foco principal la IED, por lo que es un hito muy significativo para el sistema multilateral de comercio. La perspectiva del desarrollo es relevada en su contenido, con cláusulas de Nación Más Favorecida, Trato Especial y Diferenciado y Conducta Empresarial Responsable. Por otro lado, aborda las inversiones desde una perspectiva, la facilitación, que ha sido reconocida por organismos internacionales como UNCTAD o el Banco Mundial, como una limitante fundamental para la misma, en la cual existe amplio espacio de mejora, sobre todo para los países en desarrollo”.
Desde el principio de las discusiones, los proponentes dejaron expresamente claro que quedan excluidos del acuerdo disciplinas sobre: acceso a mercados, protección de inversiones y solución de controversias inversionista-Estado. El foco no es en ningún caso modificar en sustancia las políticas respecto de la inversión que tengan los miembros, sino permitir a los gobiernos obtener un mayor rendimiento de estas, haciéndolas más transparentes y eficientes.
De las negociaciones participan 112 de 164 miembros de la OMC, sobre los dos tercios de la membresía de la OMC, siendo la iniciativa conjunta con el mayor número de participantes, y la que cuenta con el mayor número de países en desarrollo, provenientes de todas las regiones.