Hoy se cumplen cinco años de la entrada en vigencia del Tratado de Libre Comercio (TLC) entre Chile y EFTA, acuerdo que fue firmado en 2003 y que entró en vigencia el 1 de diciembre de 2004.
El comercio con EFTA ha mostrado un mayor dinamismo luego de la entrada en vigencia del acuerdo. En efecto, el intercambio comercial totalizó en el año 2008 más de US$ 660 millones, implicando una tasa de crecimiento promedio anual de 16,4% para el período entre el 2004 y el 2008, señaló el Director General de Relaciones Económicas Internacionales (Direcon), Carlos Furche.
A nivel de países, los envíos al bloque EFTA se concentran en Noruega y Suiza, países que explican más del 99% del valor exportado al bloque, y más del 98% de las importaciones. Suiza es el país con una mayor preponderancia, explicando más del 69% del total comercializado.
En relación a los productos, cabe destacar que son los minerales no cobre los que predominan en los envíos a EFTA en los últimos años, seguidos en importancia las exportaciones de bienes industriales.
La inversión extranjera directa (IED) materializada proveniente desde EFTA entre los años 1974 y junio de 2009, totalizó US$ 2.162 millones, cifra que representó el 3% de la inversión extranjera total recibida por Chile en dicho periodo.
El TLC
El Tratado de Libre Comercio Chile y EFTA fue suscrito el 26 de junio de 2003 en Kristiansand, Noruega, luego de 6 rondas de negociaciones, que se extendieron por alrededor de quince meses. El Acuerdo fue ratificado por todas las Partes en noviembre del 2004 y entró en vigencia el 1 de diciembre del 2004. En los cinco años de aplicación, este Tratado destaca por la facilidad y expedición con que las Partes han podido implementar sus compromisos y disposiciones básicas.
Desde el punto de vista estratégico, este acuerdo establece un área de libre comercio con aquellos países de Europa que no son miembros de la Unión Europea. Consolidar de esta forma la relación bilateral con la EFTA, constituyó, por tanto, un complemento y una profundización de la relación comercial con Europa, en su globalidad, concluyó Carlos Furche.